Pérdida o deterioro del equipaje
Para evitar atravesar una situación de incertidumbre que
empañe una travesía - seguramente de buenos momentos- deténgase en algunas
sugerencias siempre útiles a la hora de emprender un viaje. Más de 2.000.000 de
maletas circulan diariamente por las cintas de los aeropuertos, de las cuales
sólo una pequeña parte se extravía. Es extraño que la pérdida sobrepase las 48
horas. Por lo general, acaba en manos de sus dueños en menos tiempo. En
cualquier caso, si el extravío se produce, es necesario denunciarlo de
inmediato, aunque le garanticen que sus maletas aparecerán en el siguiente
vuelo.
Para evitar sorpresas, siempre adhiera a su equipaje una
etiqueta con sus datos personales e incluya otra en el interior, por si la
exterior fuera arrancada. Determinados viajeros añaden cintas adhesivas de
colores o lazos inconfundibles para distinguir inmediatamente su equipaje del
resto. Otro consejo es no llegar con
el tiempo justo. Puede no perder el avión, pero sus maletas tienen muchas
probabilidades de quedarse abajo.
Si al recoger el equipaje, observa que está abierto o
roto, lo primero que debe hacer es comprobar que no le falte nada y hacer la
pertinente denuncia a la compañía aérea con la que ha volado. Ellos tomarán
nota de la queja y le pagarán el valor estipulado de su maleta o la sustituirán
por otra nueva. En caso de que tuviera gastos extras por culpa del extravío
(por comprar de prendas de vestir o productos de aseo), le devolverán lo
desembolsado, muchas aerolíneas tienen una cantidad diaria estipulada. Si su
caso fuera particular y cree que debe merecer una indemnización mayor, el
reclamo es por vía judicial y hágase de paciencia para un largo proceso.
Si a la hora de recoger el equipaje, comprueba que falta
algún objeto, efectúe la denuncia ante la autoridad policial del lugar. Será
difícil que le compensen con dinero en efectivo, por lo complejo y poco
comprobable que es, demostrar que llevaba como efecto personal. Para evitarse
disgustos, lo más acertado a la hora de llevar objetos de valor es contratar
una póliza que cubra este tipo de eventualidades y que obligue a la compañía de
seguros a indemnizarlo en caso de robo o extravío.
Pasos a seguir
Con la documentación del vuelo y equipaje, un turista que viaje por LanChile deberá reclamar, antes de abandonar la Aduana,
ante el Servicio de Equipajes, en Arribos. El pasajero de Lufthansa irá a la
Oficina de Reclamos, y el de Iberia está a tiempo mientras no abandone el
aeropuerto.
Algunas empresas ofrecen millaje, otras pagan un anticipo
en efectivo y la tercera opción es un reembolso contra presentación de los tickets de compra. En Budapest no pagarán lo mismo que en
Chicago, porque en cada país existe un monto máximo que está en relación con el
costo de vida local. "La responsabilidad por pérdida, daño o demora en la
entrega del equipaje está regulada por normas nacionales e internacionales
detalladas en el pasaje. El concepto sobre el cual se calcula el monto es que
debe poder cubrir razonablemente el costo de elementos de primera necesidad
(ropa, calzado, higiene, etcétera)", explica Lufthansa.
Para la mayoría de los viajes internacionales,
el límite de responsabilidad es aproximadamente US$ 20 por kilo para
el equipaje despachado. Lufthansa, de todos modos, tiene fama de ser una de las
más generosas. Por el equipaje de mano (que en casi todas las empresas es
responsabilidad del pasajero), puede llegar a reembolsar hasta US$ 400, si se
comprueba fehacientemente que la aerolínea tiene arte o parte en su extravío.
El trámite suele ser ágil, 24 horas en Iberia y no mayor
a 48 en las demás compañías. Si tres días después de la denuncia de extravío no
hay noticias, Lufthansa, por ejemplo, le pide al pasajero que describa qué
guardó en sus maletas. Esa información se envía a la Casa Central en Alemania y
comienza el rastreo por el contenido. Si el intento es infructuoso, se paga la
indemnización. Tal vez el equipaje fue violentado (roto el candado, revuelto el
contenido o algún artículo desapareció).
En este caso, también hay que denunciarlo. Si el pasajero
no lo notó inmediatamente, varias empresas otorgan un máximo de 7 días corridos
para notificarlo.
Nunca faltan casos curiosos. El traspaso de algunos husos
horarios parece dejar huellas neurológicas en algunos pasajeros que, al llegar
a la cinta, no reconocen la mochila que ellos mismos empacaron y se llevan la
de otro.
Los vuelos de cabotaje dan menos |
En
el caso de los viajeros de cabotaje, la historia es otra. Hay que tener en
cuenta que la ley es menos generosa con las indemnizaciones dentro del
territorio nacional: $ 20 por kg de equipaje despachado y extraviado.
La indemnización que otorga Aerolíneas Argentinas, por
ejemplo, "contempla el contenido del equipaje extraviado en forma global,
sin discriminación alguna".
Los artículos electrónicos y los objetos personales no
deben ser despachados, sino ir bajo custodia del pasajero --dicen
enfáticamente--.
El monto que se paga en nuestro país está regulado por el
Código Aeronáutico y la resolución N° 1532/98 ME y
OSP", aclaran.
La indemnización solamente se paga si se agota la
búsqueda y la valija parece haber sido tragada por el Triángulo de las
Bermudas.
El monto se abonará al concluir el viaje, cerca del lugar
de residencia del viajero.
Mientras tanto, sólo se contemplan gastos para artículos
de higiene y tocador, si el turista
está lejos de su casa.
Aunque se rige por la misma legislación, Southern Winds está dispuesta a
escuchar y analizar cada caso particular.
Aunque brindan 7 días de plazo para notificar el
extravío, para evitar triquiñuelas.
Las aerolíneas recomiendan enfáticamente no despachar
laptops, joyas, documentación importante, cámaras fotográficas o artículos
electrónicos, sino transportarlos como equipaje de mano.
Aun así, algunos turistas persisten a la hora de armar
sus valijas, en guardan todos esos artículos prohibidos donde no deberían
hacerlo. Por eso, en LanChile, los artículos
electrónicos son los ítem más reclamados. Iberia
salomónicamente invita a leer la letra chica del billete del pasaje: "El
ítem responsabilidad de equipajes establece que las compañías aéreas no asumen
responsabilidad por cosas frágiles, valiosas o perecederas".